Por: Luz Eréndira
Este personaje es poco habitual en apariencia, debido a que
su trabajo aunque es muy específico, lo que es un hecho es que su labor es
igual de importante que la de un albañil, aunque más especializado.
Los yeseros se dedican a resanar y a colocar yeso en las
estructuras que tienen algunos huecos, o de plano los muros que están hechos de
tabiques, y para que tengan una mejor presentación, se aplica este
material.
De acuerdo con la página http://www.arqhys.com/construccion/yeseros.html
los yeseros aplican las capas del yeso (una mezcla pastosa de cal, arena, y
agua) a las paredes, a los techos, y a las particiones interiores de edificios
para producir superficies resistentes al fuego e insonoras. Aunque también “…pueden
trabajar en superficies o exteriores del edificio, echar, y moldear paneles
ornamentales y ajustarlos”.
De igual forma “hacen su trabajo según modelos, dibujos, o
instrucciones orales. Pueden trabajar solamente en proyectos pequeños o con un
equipo en proyectos grandes. Trabajan a menudo en cooperación con otros
trabajadores de la construcción, después de carpinteros y de electricistas y
antes de pintores y tapiceros. Los yeseros supervisan e instruyen a los yeseros
aprendices; asimismo, participan en edificios nuevos construidos y renovados,
en edificios ocupados, y en el exterior de edificios”.
Como podemos apreciar, la
labor de un yesero también es importante, y qué mejor que lo realicen con
calidad, siempre y cuando reciban un buen trato por parte de quienes lo
“contrata”.
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