Por: Luz Eréndira Torres R.
Este oficio -sin duda- es uno de los más nobles, ya que este Personaje no sólo vende (ACLARO: no de manera peyorativa) “cartón, papeles de colores y figuras”, sino que vende ilusión, alegría, diversión, en todos y cada uno de los “palazos” que l@s peques le dan a las piñatas, aunque he de decir que no sólo es un divertimento para l@s más chiquitines de la casa, sino que también es para adolescentes, adult@s y gente de cualquier edad, estrato económico, género, etc.
Y es que una piñata es casi casi un invitado “obligado” en
las fiestas infantiles: puedes encontrar de todos los tamaños, colores y
formas: desde la típica estrella, hasta unas mucho muy elaboradas y tan bien
hechas, que parecen esculpidas con cincel y martillo por un(a) escultor(a) muy
conocid@.
Según nos contó don Cuco, hay quienes no sólo las venden, sino que ell@s mismos las hacen, el proceso de producción es largo, ya que cada una tardan aproximadamente2 hrs en promedio, por lo mismo, es un oficio “familiar” que heredaron de sus padres, abuel@s, y a su vez, sus hij@s y niet@s lo realizan, lo cual es muy loable, ya que de esa forma se “asegura” la práctica de seguir creando estos bellos ornamentos.
Así que si tienes 40 y tantos o 60 y tantos, pero aún
conservas tu alma de niñ@, y/o tienes hij@s chic@s o adolescentes, please incluye
en sus fiestas aunque sea una piñata, para ayudar no sólo a este gran Personaje
de Tenoch, sino a todos los implicados que laboran en su creación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¿Te trae recuerdos? ¡Cuéntanos tus anécdotas!